Si bien es cierto que el Marcado CE no es ninguna garantía de la calidad del producto, sino una declaración del fabricante (o del importador) de que el producto cumple con las normas exigidas, y es una obligación para comercializar los productos dentro de la Unión Europea, es necesario conocer lo que diferencia este marcado con el de “China Export”, que tiene un logotipo muy similar, pero que no asegura ningún tipo de conformidad con las normas europeas.
Según explica el comparador www.comparalux.es, el marcado CE es “un indicador de la conformidad del producto con la legislación de la Unión Europea, y permite la libre circulación del producto dentro de la misma. Al añadir el Marcado CE a un producto, el fabricante declara, bajo su exclusiva responsabilidad, la conformidad de dicho producto con todos los requisitos legales exigidos para alcanzar dicho marcado, y asegura la validez del producto para ser vendido en todo el Espacio Económico Europeo”.
El Marcado CE no indica que el producto haya sido fabricado en la UE;se limita a afirmar que el producto es evaluado antes de ser introducido en el mercado y que, por lo tanto, satisface todos los requisitos legales para ser introducido en el mismo. A los productos con Marcado CE, se les añade el logotipo correspondiente (normalmente en el propio producto)y si esto no es posible, en su embalaje y en la documentación técnica que lo acompañe. Dentro de la Unión Europea no pueden ponerse en el mercado productos sin Marcado CE.
¿Dónde está la confusión con el marcado “China Export”?
En los últimos años, ha aparecido también un símbolo CE que son las siglas de “China Export” y que, a pesar de ser casi idénticos, significa que el producto ha sido fabricado en China y, por tanto, el fabricante o el importador no se compromete a cumplir las normas europeas.
¿Dónde está el truco, entonces? El engaño es fácil: el símbolo de “China Export” aproxima ambas letras, reduciendo el espacio que las separa en el símbolo “Comunidad Europea”.
Legalitas, en declaraciones a El Periódico, asegura que “la modificación es tan pequeña -misma tipografía, tamaño y color- que pasa totalmente desapercibida para el consumidor, puesto que lo que hace es aproximar ambas letras del símbolo ‘CE’ reduciendo el espacio que las separa entre sí”. “En el etiquetado asiático la ‘C’ y la ‘E’ están algo más unidas que en el etiquetado europeo”. Digamos que la ‘E’ quedaría dentro del círculo que ocuparía la ‘C’.”
Comparalux advierte que el instalador ha de tener en cuenta que la modificación de una luminaria adaptándola a diferentes soluciones (por ejemplo, sustitución de una lámpara de descarga por una de reemplazo de LED, sustitución del sistema óptico, etc…) no conserva el marcado CE de la luminaria original. El producto resultante es una nueva luminaria, y quien efectúe dichas modificaciones se convierte en fabricante de la misma, siéndole aplicable toda la legislación y normativa específica, así como la responsabilidad sobre el producto.